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Justo cuando apagamos la música del karaoke en casa de Carolina su vecino puso la música a todo volumen. Terminamos la fiesta y el vecino comenzó la suya. Con Cynthia nos fuimos a dormir cada uno a nuestra habitación designada con la esperanza de que la música estridente del vecino parara en algún momento pero no paró. Toda la noche tuvimos que soportar los gritos desaforados de la fiesta de al lado. Por otro lado, A Cynthia le había planteado un reto. Se le había dicho que desde el inicio de la actividad del Karaoke no se le iba a devolver la ropa hasta el día siguiente después del desayuno. Era un reto que teníamos que cumplir ambos. Cynthia que nos sorprendió por su determinación cumplió el reto casi al 100% Por eso que después de la actividad del karaoke ambos nos quedamos en modo nudista toda la noche hasta la mañana siguiente después del desayuno en que recién volvimos al modo textil. Era temprano aun cuando  salimos con Carolina y Cinthia rumbo a Puerto Bonito que era lo que teníamos planeado para ese día. Caminamos hacia el paradero y casi después de una hora nos encontramos con Celso Mendo quien amablemente nos llevó a la Playa ese día. Después de las paradas y las compras llegamos a Puerto Bonito algo temprano. Ayudamos a poner las pancartas, a instalar las sombrillas, a instalar el toldo, la parrilla, etc. Es la labor que semanalmente cumple nuestro amigo Celso Mendo fielmente y en forma voluntaria. Es algo que tenemos que agradecer los nudistas peruanos, es un ejemplo de compromiso y pasión por el nudismo naturista por parte de uno de los líderes principales del grupo ANNLI de Lima. Luego que todo estuvo listo, nos relajamos un poco bajo las sombrillas, jugamos algunos juegos de mesa en la arena, conversamos y así se pasó gran parte de la mañana. 

La visita del heladero es icónica. Por muchos años el mismo heladero de Donofrio visita la Playa Puerto Bonito a abastecer con los ricos helados a los veraneantes nudistas y se ha convertido en un amigo de todos. Por eso no desaprovechamos la oportunidad de tomarnos unas fotos con el heladero oficial de Puerto Bonito. Por la tarde con Celso, Cynthia y Carolina nos fuimos al fondo de la playa y allí sobre esa roca en donde hace 13 años tomamos las primeras fotos naturistas de nuestra historia volvimos a tomar unas cuantas fotos. También nos fuimos al fondo y tomamos otras tantas. Luego regresamos, nos metimos al mar un rato y al final enterramos a Cynthia en la arena, típico de un día de playa en la costa de Perú. La gente se iba yendo y poco a poco nos fuimos quedando solos en la playa bajo una tenue lluvia que despidió ese domingo de verano en Puerto Bonito. 


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